jueves, 21 de septiembre de 2017

Quousque tandem?



A fuer de español soy también catalán. Yo soy catalán, tanto como los que allí residen.
Por historia. Es un hecho y me avalan más de dos mil años de trayectoria común. Los últimos quinientos, íntima.
Ha corrido mucha sangre de mis antepasados, luchas, guerras, conquistas y reconquistas, para que esto sea así. No se trata de una opinión, son, simplemente, hechos.
Corolario de esa trayectoria común es la Constitución de 1978, que no surge por casualidad sino como consecuencia de este devenir juntos, donde se constata un hecho: “la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles”.
Esta norma constitucional, que podrá gustar más o menos,  es lo que tenemos para ir bandeándonos. Se puede reformar pero no destruir. Su destrucción, que es lo que quieren los rufianes, nos lleva al caos y al final a la guerra.

Por eso, los que residen en Cataluña y quieran, que además no son mayoria, ya que muchos que parecen callados respetan y apoyan el orden legal, manteniendo un compromiso cívico en una sociedad desgarrada, pueden propugnar su independencia, pero no pueden dejarme a mi fuera de esa decisión, porque yo también soy catalán y no voy a dejarme arrebatar lo que es mío por herencia y derecho y además estoy dispuesto a defender con uñas y dientes.

No hay comentarios:

Publicar un comentario