viernes, 25 de abril de 2014

HHhH

Estoy leyendo HHhH -Himmlers Hirn heisst Heydrich, traducido: “el cerebro de Himmler se llama Heydrich”- de Laurent Binet, que ha sido premio Goncourt 2010.
Voy por la mitad y me está gustando bastante.
Ayer leí la matanza de los judíos de Kiev. Terrible. Por decir algo. Realmente no hay palabras adecuadas para expresar esa maldad en estado puro. Iba a describir la escena, de un espanto sin límites, donde aparece la figura siniestra del “acomodador/apilador”, pero prefiero no hacerlo.
Todo ello me ha impresionado, como no, y he soñado con ello.
Reyes, los niños y yo, éramos los perseguidos. Acuciados por las grandes matanzas, le digo a mi mujer que debemos marcharnos, dejarlo todo, casa, dinero, trabajo, todo, todo, que es absurdo quedarse porque al final nos matarán. Pero no sabemos, ni dónde, ni cómo irnos, ni con qué mantenernos, llegado el caso. Estamos atrapados, realmente, por las circunstancias. Como lo estuvieron, tal cual, toda aquella pobre gente.

No hay comentarios:

Publicar un comentario